Hoy era el día. Después de haber comprado los PANTIES y la PULSERA, Laura ya tenía todo lo necesario para hacer su primer orgasmo arruinado. Le había sido autorizado porque había sido capaz de aguantar 2 semanas en castidad, es decir, 14 días, mucho tiempo para Laura, visto desde antes de entrar en este CONTROL DE CASTIDAD, aunque luego el tiempo va pasando y sin darte cuenta se llega, eso sí con mucha fuerza de voluntad para que la mano no fuera donde no debía, y con el apoyo de Control de Castidad.
Iba vestida sólo con los panties y la pulsera. Estaba de rodillas, delante del móvil, listo para grabar la escena. He empezado tocándome el pene como si fuera un clítoris, lo tenía erecto hacia arriba, dentro de los panties, y con el dedo índice me lo iba tocando arriba y abajo y en círculos, como una Mujer, me he empezado a mojar, los panties se iban humedeciendo, así he estado como un minuto y medio, a la vez me tocaba los pechos y los pezones.
He parado vídeo porque creía que había acabado, pero he vuelto a seguir porque me notaba que me quedaba dentro semen. Luego por fin en el 5.11 he parado, ha salido todo el semen a 5.14 y ha estado más de 10 segundos saliendo, lógicamente el chorro principal al principio.
Era mi primer orgasmo arruinado. Llevaba varios días nerviosa pensando en este día, no quería hacerlo mal, quería conseguir un verdadero orgasmo arruinado, no quería dejarme llevar por el egoísmo y hacerme una paja como las de antes. Y el correrse así es una sensación extraña, te deja a medias después de la excitación. Es agradable, como tocarse el pene, te alivia algo la tensión sexual de estos días de castidad, pero evidentemente te deja a medias.
El correrse así tiene un motivo, según me han explicado en control de castidad, y es que no baje el nivel de testosterona como si baja con una paja normal.
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