Incidente en castidad.

Hay momentos en que un abrazo inesperado, uno que sea un poco más íntimo o inesperado, de una amiga donde ella roza la dureza del dispositivo. Esto me pasó anoche. Afortunadamente, Laura ya sabía de mi castidad. Era la mejor amiga de mi esposa Diana, y cuando había terminado unos aperitivos, me dió uno de esos abrazos más apretados de lo normal. No creo que fuera intencionado, pero mientras me abrazaba, noté como ella fué capaz de sentir mi dispositivo. Además, no traté de retirarme o separarme de ella, yo noté de inmediato que había sentido la firmeza de mi jaula. El incidente no fue ignorado por ella, tampoco. Por el contrario, llevó a entablar una conversación acerca de mi castidad entre ella, mi esposa y yo. "¡Oh! Me había olvidado de que" Laura dijo cuando terminó de abrazarme. "Ya sé lo que llevas!" bromeó, yo tenía la esperanza de que no comentara nada. Pero no fue así. "Sí. Carlos ha estado haciendo cumpliendo muy bien con su castidad. Este mes lleva bloqueado casi el 90% del tiempo, ¿verdad?" Diana dijo buscándome para verificar el tiempo que he pasado en la jaula en lo que va del mes. "Sí, un poco menos de 88% en este momento", le contesté. Laura se impresionó, preguntándome cómo me he sido capaz de mantener tal estricto horario. La mirada en el rostro de Diana era tal que yo sabía que debería dar una respuesta a la pregunta de Laura. Hice todo lo posible. Le dije lo que era más fácil ahora que al principio y que me acabé acostumbrado a llevar siempre la jaula de castidad. Había algunas preguntas poco embarazosas, tanto fisiológicos y psicológicos, una indicación de que Laura parecía muy interesada en el tema. Diana intervino de vez en cuando, pero dejó a Laura que me hiciera las preguntas que quisiera y esperó a ver que contestaba. Yo no estaba cómodo con el tema de conversación. Le dí mi perspectiva sobre la castidad y como nos ha hecho a todos la vida mucho más fácil. Me preocupaba que Laura podría preguntar acerca de mis orgasmos. Ella no lo hizo. Probablemente supone que mis orgasmos solo tuvieron lugar cuando yo estaba libre, en ese 12% del tiempo en libertad, y me preocupaba de que Diana interviniera en algún momento y dejé a Laura interpretar que habia sido capaz de disfrutar un orgasmo mientras que no llevaba el dispositivo. Afortunadamente ella no volvió a tocar el tema y, finalmente, la discusión tomó otra dirección. Ella no sabe que mi 12% de tiempo en libertad ha sido para tener erecciones, pues las he preferido a tener eyaculaciones.