En castidad siempre tendrás orgasmos arruinados.

La filosofía de la negación. Negar el orgasmo a tu pareja no es tan sencillo como impedir que la otra persona alcance su orgasmo. Hay que lograr esto en repetidas ocasiones que siempre esté al borde del orgasmo, es una disciplina, un ejercicio, una habilidad, una práctica, y sobre todo se trata de la relación de fuerzas, que el acate sin pedir más tu decisión de estimularle o parar cuando creas conveniente . El sexo para él es placentero, se queda con las ganas de acabar.

Recuerda tener a mano lubricante y un poco de agua, la mano ha de deslizar muy suavemente para mejores resultados.

El estado de excitación que se consigue siendo negado una y otra vez no se puede describir ninguna otra manera, aunque algunos pueden utilizar la palabra frustrante. No todo el mundo puede manejar esta euforia

Cada borde solamente lo hace más duro, más rojo, más sensible, y más en un estado de felicidad pura y a la vez de frustración.

Su pene es manipulados para alcanzar placeres indescriptibles sin que alcance nunca la liberación final. Aunque eyacule, el semen siempre sale fluyendo sin un chorro potente, síntoma de que el orgasmo es fustrado.

Algunas personas consideran que el sentimiento es similar a un trance o un proceso hipnótico.

Si no lo has probado, debes hacerlo con tu pareja es algo especial y que no debe subestimarse.