Mi cuñada es una cabrona.
Mi cuñada estaba muy emocionada y ansiosa por mirarlo más de cerca. Ella me llamó para pararme frente a ella. Ahuecando mis bolas, apretó firmemente y luego tiró de ellas para ver la jaula moverse hacia abajo cuando lo hizo. Agarrando la jaula, tiró y la retorció sonriendo ante lo segura que estaba. Finalmente, tomando la jaula con dos dedos, lo deslizaría hacia arriba y hacia abajo, un poco, iría, usándolo como si me estuviera sacudiendo la polla. Al poco no pude evitar dejar caer unas lágrimas de castidad. Eso la fascinó y ella observó atentamente, con una gran sonrisa en su rostro, mientras ver cómo mi polla llenaba la pequeña jaula, y el pene luchaba por crecer y se pegaba a las barras de la jaula.Ella insistió a mi esposa sin cesar hasta que mi esposa finalmente le dio la llave de repuesto. Después de eso, mi cuñada bromeó y atormentó mi polla cerrada en cada oportunidad que nos veía. Incluso se informó por internet y mirando mi tipo de jaula, me encontró un aro de púas para mi jaula. Ella lo compró, lo envolvió y me lo regaló delante de mi esposa. Mi esposa se echó a reír e insistió en que, dado que su hermana era lo suficientemente dulce como para comprarme

un regalo, me puse el aro inmediatamente y se los mostré.Cada vez que mi cuñada se acerca, se asegura de que los picos estén adentro y luego me molesta sin descanso. Ella dice cosas
sugestivas, sabiendo que no me he corrido en mucho tiempo y no hace falta mucho para que mi polla intente ponerse dura. Le encanta exponerse a mí, sabiendo que está perfectamente segura y que no hay nada que pueda hacer. Se inclina ligeramente delante de mí, frotando su culo muy atractivo contra mi jaula. Últimamente, su cosa favorita es hacer que me baje los pantalones, burlarse de tener que usar bragas y llamarme una "sissy" y luego darme una "hacer un ademán de darme mamada". Miro impotente mientras ella chupa el tubo en su boca, lame mis bolas, lame los trozos de carne que exprimen los agujeros en la jaula mientras mi polla intenta endurecerse y las púas presionan más y más profundamente en mi polla.
Le encanta la expresión de mi cara, sabiendo lo que viene, sabiendo que no tengo control sobre eso, sabiendo que pronto mi polla será apretada, las puntas de mi jaula se hundirán profundamente en la piel sensible. Como dije, la hermana de mi esposa es una cabrona.
Excelente relato
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