lunes, 27 de febrero de 2017

Poliamor a fondo. -1-

Este es el primero de una serie de post que centraré en las razones que llevan a una esposa a decidir dejar de tener relaciones sexuales con su marido.
Es un proceso que tarda tiempo en una relación normalmente pasan años hasta que ella decide tomar la decisión de dejar de tener relaciones sexuales con su marido.
Entonces empecemos. Imagine esta escena:
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Imaginese por un momento que la que está a su lado es su esposa. Tú eres un hombre atractivo, (y ella también se siente atraído por tí!).
Ella tiene un amante. El marido ha pedido estar presente cada vez, y ella ha accedido porque lo ama y no quieres que se sienta excluido. Además, a ella le excita ser observada mientras que está teniendo sexo.
La esposa y su amante están de nuevo pasando un buen rato explorando los cuerpos del otro. A veces se pierde en la emoción de todo y se olvida de que su marido está allí al lado.
Este hombre atractivo te está follando de la manera en que necesitas ser atendida. Lo hace lento y rápido, a veces sensual y otras más áspero, y sigue yendo y saliendo sin correrse demasiado pronto. Ella ha llegado al orgasmo casi cada vez que los dos tienen sexo. Mientras tú puedes tocarte, estas cerca, pero recuerdas que tu esposa te lo tiene prohibido. No puedes correrte. Estás en castidad. Tu cuerpo se está calentando todo, y nada se siente tan bien como cuando ella llega a su orgasmo.
La esposa en medio de su orgasmo miras para ver a su marido allí, acariciando febrilmente su polla, observándote a los dos.
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Hay un hombre que te está dando tanto placer en este momento, follándote tan bien y dándote tu orgasmo. También hay otro hombre, tu marido que está viendo porno en vivo y masturbándose, pero él no puede eyacular. Si lo hace no volverá a acompañarte en la próxima cita. En ese momento, sientes tanta lujuria por ese hombre que te está follando y poco (si es que lo hay) por el hombre que se masturba mientras te observa. No estamos hablando de amor aquí, sino de lujuria. En realidad se ve un poco patético, acariciándose a solas.
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 Ahora, da un paso atrás y echa un vistazo a la situación y los eventuales impactos de la misma.
En ese momento, la opinión sexual sobre el marido está disminuida. Casí hundida por un momento. Olvídate del profundo amor que tiene por ti, y centraos en ella. Se reduce a una cosa en ese momento, la dopamina. Mencioné el impacto de la dopamina en un post anterior. Una mujer está conectada para obtener una corriente de dopamina, que impulsa el atractivo sexual, cuando ve a un macho alfa con energía y poder sexuales crudos. Su cuerpo responde físicamente a los sentimientos que la fiebre de la dopamina le está dando. Su coño se está volviendo más húmedo por dentro, y su lujuria por él está por encima del que siente por su marido. La lujuria es poderosa. La combinación de su lujuria por él en ese momento, y su falta de lujuria por su marido en ese momento, juegan una parte inconsciente en sus futuros instintos hacia ustedes dos. Voy a entrar más en los detalles de su lujuria por él, pero quiero centrarme en la falta de lujuria por el marido.

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Esa imagen del marido acariciando su polla mientras él la follaba quedará en ella, y ella recordará ese momento por mucho tiempo. Dado que está conectado con el momento en que estaba siendo follada tan bien por él, recordará al mismo tiempo el placer que le estaba dando cada vez que recuerda la idea de que te masturbas mientras mirabas a los dos teniendo sexo. A menudo recordará el breve momento de verte patéticamente acariciándote. Si el marido ve regularmente a los dos teniendo sexo, entonces recordará varios momentos de esta vista. No será un pensamiento consciente cuando recuerda el momento, pero inconscientemente perderá el interés sexual en ti.
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En esos momentos, ella no recibe la menor fiebre de dopamina mientras piensa en el marido. Ella no te desea sexualmente en esos momentos. Con el tiempo, esto podría contribuir a la pérdida permanente de la lujuria por el marido.
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No le gustará tener estos pensamientos inconscientes, y se sentirá dividida entre su amor por su marido y su momentánea falta de lujuria por él. Ella quiere sentir lujuria por su marido, pero ella lo está encontrando cada vez más difícil. Aceptalo la castidad es la mejor opción.

1 comentario:

  1. ¿No creéis que él no debería poder tocarse? Que ella disfrute con otro no justifica que él deje de estar en castidad. Al contrario.

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