lunes, 1 de agosto de 2022

Vacaciones.

Tengo a mi marido en castidad. Nuestra relación ha ido con el tiempo derivando hacia el rol de hotwife y casto cornudo y así llevamos unos 5 años.

Os contaré una situación de este verano mientras pasamos unos días en la playa. Delante del apartamento que habíamos contratado todos las tardes se ponían un grupo de negros con sus mantas vendiendo toda clase de artículos: zapatillas, camisetas, bolsos, etc.., y entre los vendedores se encontraba uno que solo de mirarlo se me hacia la boca agua de imaginar el pedazo polla que tendría. Los días fueron pasando y yo cada día le decía a mi cornudo que me concertase una follada con el moreno y así fue como un día mi marido se acercó y con la excusa de interesarle la comprar de varios bolsos, a 20 € bolso, le dijo que se pasara a nuestro apartamento para yo los viera.

Por el camino mi marido le explico el verdadero motivo, que era follarme mientras el miraba, el moreno que era de Senegal acepto sólo si antes le compraba cinco bolsos, fué así como le pago 100€. Entonces al llegar al apartamento este le dijo a mi marido que me desnudase y también se desnudase mientras él se quitaba la ropa y debajo de ella apareció un cuerpazo, pero cuando se bajó los pantalones y los calzoncillos le apareció su pollón, largo pero sobretodo gordo muy gordo. En cuanto me vio desnuda aquel aparato empezó a crecer y engordar mientras le ordenaba, sí ordenaba porque pronto se dio cuenta de que mi esposo era un sumiso cornudo al ver la jaula de castidad, le dijo que me chupara mientras se puso detrás de mi cogiéndome de la cintura la cual me metió sin más preámbulos comenzando un mete saca casi violento.

Y él, muy atento y tras pegarme dos o tres emboladas fuertes que me hicieron lanzar sendos gemidos, me la sacó lentamente del culo, dejándome notar perfectamente como aquel gordo y duro tubo iba saliendo de mi trasero y no aguantando más se corrió.

Aun le dio tiempo a empalmarse de nuevo con las bocas de mi cornudo y mía y volvió a follarme por el culo y el coño aunque esta vez duró menos y se corrió encima de mi trasero, en la follada él solo buscó su placer no preocupándose ni siquiera del mío, aunque fue una de las folladas en que más he disfrutado en mi vida.

He de deciros que las folladas fueron siempre con preservativo, que se quitaba cuando se corría y me extendía la lechada por el cuerpo.


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