7 aspectos de la castidad.

La negación y la Castidad - ¿Por qué? Aunque sin duda hay algunas mujeres que disfrutan de negar el orgasmo en los hombres. La realidad es que en esto del control de castidad son más los hombres los que se vuelven adictos a mantenerse castos, mucho más que ellas.....Pero es lo que le atrae de esto del control de castidad....que a menudo casí exigen a sus parejas que les controlen su castidad masculina.
 1Castidad masculina como Juego erótico El mismo juego mejora y aumenta la intensidad de las experiencias sexuales. Este es uno de los motivos más comunes para empezar a practicar el control de la castidad masculina como juego erótico. El aplazamiento de los orgasmos se convierte en una experiencia mucho más apasionante, intensa que el propio orgasmo conseguido cuando por fin termina el período de negación. Para la mujer el hecho de provocar al hombre sin autorizarle a eyacular aumenta la intensidad de este período de castidad, preferible incluso al orgasmo.
2La castidad masculina como intercambio de poder La negación del orgasmo es un modo íntimo y directo de ejercer la autoridad de la mujer sobre su pareja masculina es una forma muy pura y sencilla de ejercer el control. El simple hecho de no permitir a su hombre que se masturbe le va a dar placer el simple hecho de cumplir con sus deseos.
3La castidad masculina y la Virilidad El hecho que desee ser controlado es una confirmación de su virilidad. La lujuria de que es visto por su pareja como fuerte y varonil.
4La castidad masculina y los sentimientos de culpa sexual Algunos hombres se sienten culpables por sus deseos sexuales y necesidades de masturbarse. Quizás incluso se sienten culpables por ser hombres. Algunos incluso pueden llegar a creer que la sexualidad es algo pecaminoso. Y las mujeres son puras. Esto tal vez es la idea de algunos de poner a su pareja en un altar.
5La castidad masculina y disforia de género La disforia de género sin duda motiva el deseo de algunos hombres para hacerse castos. En algunos casos consideran que sus penes estan poco dotados, o por el motivo que sea, sienten la necesidad de no sentirse hombres. La negación - junto con sissyfication - les permite acercarse más a lo que sienten que realmente son.
6La castidad masculina y el mal comportamiento Parte de la idea de la negación del orgasmo es que el hombre se hace menos atento, servicial, tal vez se convierte en un borde francamente hablando cada vez que le permites un orgasmo. Un hombre cuyo comportamiento cambia sustancialmente, se vuelve poco atento con su pareja, con lo que la solución es ampliar los períodos en que está borde y poner su jaula más tiempo. Así se asegura que él merece que su miembro esté bloqueado más tiempo. 7 La castidad masculina y el Bondage. Muchos hombres heterosexuales, por su propia naturaleza, tienen el deseo y la necesidad de sentirse bajo las directrices de una mujer dominante. Desean ser sometidos por ella. Esa es la raíz de la apelación general del deseo de servidumbre a la pareja. La limitación física por la jaula puede ser una experiencia satisfactoriamente inequívoca del control de la castidad por parte de ella. La jaula aparte de la evidente finalidad de la regulación del orgasmo masculino es un dispositivo que permite sentir la servidumbre incluso cuando están lejos e incluso en público sin vergüenza. Un dispositivo de castidad masculina es un símbolo tangible del intercambio de poder.