viernes, 13 de julio de 2018

PARTE 8 Autobiografía. Historia real. Memorias y forja de un cornudo casto: Capítulo IV - “La telaraña” - Una “especie” de amante (Parte II)

PARTE 8.Autobiografía. Historia real. Memorias y forja de un cornudo casto:

Capítulo IV - “La telaraña” - Una “especie” de amante (Parte II)


(He cambiado los auténticos nombres para respetar la confidencialidad e intimidad de las
personas aludidas, aunque son similares a los reales)
(Los capítulos anteriores están en mi etiqueta de “kino” de este blog)
Sentados en su vehículo, bajo la penumbra de la fundida farola, al abrigo de la fría
noche, María seguía desgranando los términos contractuales y los pormenores de nuestra
potencial “relación”:
María(concretaba para dejar claro el acuerdo evitando malos entendidos posteriores):
¿te preguntarás qué sacarás tú de todo esto, Kinito? Por supuesto que no voy a dejarme
follar por “esa cosita”, por esa mierdecilla tuya ridícula, Pitito... no te ofendas, pero es
así!!... yo necesito un buen rabo, un gran, caliente y duro pedazo de carne dentro de mí
que “me rompa” las entrañas... que me haga vibrar, que me “rellene” entera, que lo note
palpitar y bombear dentro de mi coño... que “me reviente”... y un tío con presencia, con
saber estar, carácter, con un buen vergón... con tu pichurrina ni me enteraría de si está
dentro o no, de si me la has metido... no llega a ponérsete ni dura ni apenas te crece... se
requiere un hombre de verdad para complacerme y satisfacerme, no una cosita como tú.
Yo (intentando estar a la altura y contentarla): Claro, María, es evidente... ya lo sabía...
María: ...pero hay veces que me viene un “achuchón”, estoy caliente, me arde el
“chichi” encontrándome en casa sola, pinchada con los tres niños sin poder salir porque
son aún muy chicos y Juan está en el bar la jornada entera, la cafetería, pedidos,
repartidores, clientes... sin poder moverse... y comprenderás que una mujer como yo

necesite con urgencia satisfacerse, hacerse un dedito para relajarme de las tareas del hogar,
de mis hijos, de mi trabajo... lo cierto es que... me excita mucho mas hacerlo delante de
un mirón frustrado como tú, Pitito... me encanta exhibirme, correrme ante alguien... que
me observen... ser observada... y me calienta mucho “hacérmelo” con alguien “tan
necesitado” como tú, además que maneje a mi antojo sin trabas, y haga lo que yo quiera.
...bueno mi amante me folla increíblemente bien... en la empresa lo tiene fácil, Jorge es
el dueño de la gestoría donde trabajo, el Jefe de la sociedad, diciéndolo pronto y sin rodeos
“mi jefe en todo”, y yo... “su secretaria para todo” así que “me ordena y manda”, solo
tiene que llamarme a su despacho y cerrar la puerta sin más prolegómenos, a veces sobre
su misma mesa me baja las bragas y me mete su pollón sin ningún tipo de “protocolo” ni
contemplaciones, sin dirigirme la palabra... se desfoga su rabo, se descarga su “medio
litro de leche” y me echa de su oficina sin miramientos para seguir trabajando, la tiene
bien grande y dura, es un supermacho, un placer, un gusto su gran polla... pero lo que mas
me calienta es la situación, con que desdén lo hace, cuando me llama a mi mesa de trabajo
por la red interna y me ordena que vaya a su despacho ya sin bragas para “echarme un
polvo rápido” o solo me dice “necesito tu chocho” putón, nada mas oirlo mojo como una
perra, Pitito... de lunes a viernes en horario laboral me la mete una o dos veces al día... o
me hace mamársela... o me hace una paja o yo a él, o me la introduce por “retaguardia”...
sí, Pitito, mi ojete tampoco se escapa a los ímpetus de su ardiente y erecta polla cuando se
empalma... depende la jornada... lo que esta claro es que mi conejo nunca escapa sin su
buena ración diaria de nabo, sin un “buen estoque”. (Mucho después me enteré que a su
marido no lo dejaba introducírsela por el ojete, pero a su inseminador Jorge sí,su puerta
trasera era “privativa de su amante”, solo Jorge podía follársela por la puerta trasera).

Yo intentaba añadir algo para estar a la altura, pero seguía estupefacto, y no se me ocurría
nada inteligente... y como dice el acerbo popular: “Mas vale parecer tonto por callado,
que abrir la boca y demostrarlo”...

Lo que sí “percibía” es que cada palabra que emitía, tenía un efecto directo sobre mi falito,
notaba que “adquiría vida” vibrando levemente, “sentía que tenía algo ahí abajo”, por
escaso que fuera, lo cual era una sensación nueva para mí, mi interlocutora continuó con
su casi... monólogo...
María: Jorge está casado con dos hijos al igual que yo que tengo tres niños de corta edad,
viniéndole “a huevo” este rollete conmigo, es discreto y seguro para ambos, además no
tiene ni que desplazarse ni inventar coartadas para su mujer. En la oficina solo Jorge tiene
despacho individual, los restantes trabajadores, que somos cinco, dos hombres y tres
mujeres estamos en un loft, un gran espacio abierto unos enfrente de otros... así que, como
él sabe que me chorrea el chochete cuando tengo espectadores, que soy exhibicionista y
me gusta “el riesgo” de ser descubierta, me llama por el telefonillo interno, por
intracomunicación como si fuera un trascendente asunto de trabajo y me ordena que entre
en su despacho sin bragas... me dice cosas como “putilla, bájate las bragas y ven para
acá con el chomino accesible
”... escuchar eso y mojar es todo uno, pitito... nada mas
pensarlo me “pongo”... hmmmmm... y el tener que quitarme el tanga a escondidas por
debajo de la mesa con l@s compañer@s delante sin que “me pillen” me pone el chichi a
mil... me pone el coño babosillo, he llegado a un punto que me chorrea la rajita nada mas
oír la voz de Jorge sin que diga nada del otro mundo, es como aquello del “perro de
Pavlov
” (reflejo condicionado)... es solo sentir su “timbre” y humedecerme...
hmmmmm... así que cuando entro a su dependencia para despatarrarme sobre su mesa, mi
jefe ya tiene el chochete de su guarra bien “aliñado, ”lubricado y jugoso para la
penetración sin prolegómenos ni contemplaciones”
... hmmmmm... me estoy
calentando... me baja flujo solo recordando... yyy... hmmmmmm... es que lo pienso...
Además él cierra la puerta de su oficina pero no echa el pestillo, el morbo y el
temor de ser descubierta me encharca “todavía más”... hmmmmm... María volvió de
repente del flash-back y ensimismamiento en el que ella sola se había sumergido, yo
no podía creer lo que estaba oyendo, me costaba asumir que era real:
María: ¡¡Pero bueno, a ti qué te importa!!?? Mediapicha!! ...es que voy a tener que darte
explicaciones???... a ti??? JAJAJAJ... me voy por las ramas yo sola pensándolo, Pitito...
A lo que voy!!
Sé que con tu mujer no tienes sexo alguno (sí, exacto, y, bien que “lo publicaba”
mi señora a los cuatro vientos) y que yo estoy muy buena, lo que ganarás de este convenio
es que te hartarás de verme desnuda normalmente por skype, te lo garantizo, me correré
ante ti por webcam, me abriré de piernas, me veras el chochete y me tocaré hasta que te
hartes de verme la raja, mi ojete, las tetas, y eso me pone cachonda a tope, pero tendrás
que acatar determinadas condiciones.
En casa me haré mis “deditos” y me correré delante de ti que me observarás sin
hacer ni decir nada... no quiero que te toques cuando me mires ni que te derrames hasta
que yo te autorice, que será en las escasas ocasiones en que nos veamos personalmente y
te pajee yo directamente, descargándote esa menudencia que tienes entre las piernas ten
claro solo tendrás derecho a eyacular cuando nos veamos en persona y conmigo, ante mí...
y en mi mano.

...Cuando yo esté en el piso con los niños y me dé el “apretón” contactaremos
virtualmente por cam, a mí me encanta enseñarlo y lo que mas me excita es una paja con
espectadores, hacerme “mis deditos” ante alguien, exhibirme, me vuelve loca mostrar mi
rendijita bien abierta y babosilla, tendremos cibersexo a diario, pero no me gustan los
marranillos pajilleros, así que aquí quien se toca soy únicamente “yo”, sola y
exclusivamente “yo”, tú no...me masturbo “yo” y me corro “yo” sola... y a ti no se te
tiene ni que poner mínimamente dura mientras me observes, no quiero guarrillos
cascándosela mientras miran cómo me hago mi pajita... por eso te he escogido a ti, ¿esta
claro?... me transmites confianza por ser tan... tan... tan poca cosa, tan... impotente y
poco “exigente”... no eres ni medio hombre, pero me haces el “avío”, me puedo apañar
contigo... aunque seas un pobre apocado... un desgraciado sin carácter... eres justo lo
que busco...
Yo: Sí, María. Gracias, María... yo... no sé qué decir... es un gran honor para mí...
María: ...únicamente eyacularás cuando quedemos en algún sitio para que me “lo
comas” y me hagas “un dedito” en persona. Te aseguro que te vas a hartar de tocarme la
raja y no te vas a arrepentir del trato... pero solo en esas citas tendras permiso para
correrte si te autorizo, seré yo quien te aliviaré en “dos sacudiditas” como te acabo de
hacer si lo estimo oportuno, si te veo muy “desesperado” y me lo ruegas mucho, si no,
tendrás que esperar a nuestro siguiente encuentro en real, de esta forma solo pensarás en
mí y estarás ansioso por verme, por escribirme constantemente por whatsapp y porque
contacte contigo. Estarás el día entero mirando el móvil por si tengo a bien responderte o
decirte algo, esperándome permanentemente y adorando a tu única Reina y Propietaria que
seré yo... como has comprobado no tengo ningún problema en hacerte una pajita
“rapidita” como ahora cuando tengamos esa especie de... ¿Cómo llamarlo? sí, especie de
“cita”, “cita de amantes” JAJAJAJ (volvió a escapársele una risotada involuntaria al
pensar en mí como “amante”), te la cascaré como ahora, “un meneito rapidito”... “la
sacudidita” no es para mí ningún problema, no me cuesta hacerte “el favorcito”, a la vista
está que requieres poco “trajín” y casi ningún “trabajo” y será muy breve, tan breve
como tu pequeña cosita...
María: El asunto ira así, cuando quedemos, primero te descargare en dos segundos esos
minihuevitos de nene” que tienes, para que acto seguido no sientas ningún placer
mientras me masturbes, me toquetees y me trastees el chocho... porque yo sé que los tíos
perdéis el interés y las ganas una vez os habéis “descargado”, no quiero que “tú” goces a
costa de mi coño, lo que deseo es que, una vez desfogado tú, te centres en “mí atención”
tranquilamente y en proporcionarme fría y objetivamente la mayor satisfacción sexual
posible, sin pensar en ti, concentrado únicamente en hacerme un buen “servicio”... te
aviso que yo no soy como tú, sino “que soy muy exigente”, tardo mucho en correrme así
que no te tienes que desesperar, te vas a hartar de vérmelo, tocármelo, comerme el chichi,
el culo y acariciarme las tetas y los pezones durante horas, pitín... ese será “tu premio” a
tu celibato y castidad..
...mi orgasmo es lo único que debe dar sentido a tu vida... en lo unico que has de pensar y
concentrarte, mis corridas no son como tus lamentables y penosas pajillas, se requiere
tiempo, adiestramiento, tranquilidad, habilidad y destreza en lo que haces, recrearte en
besármelo, comérmelo, lamérmelo, chupármelo, sobármelo, que tu lengua y tus manos
aprendan íntegramente la anatomía de raja y mi culo, te enseñaré lo que me gusta y dónde
me gusta... cómo me gusta y el tiempo concreto que me gusta... acariciar mi chichi en el
punto exacto, mimarlo mientras me trabajas mi culo con la otra mano... espero que
absorbas rápido las enseñanzas, he de gozar al máximo tus dedos y tu boca, pitito...

Eso es lo que hay, decídete rapidito o te doy puerta!!... Ahora te doy mi skype y
mi número de móvil... por si te interesa... las condiciones son esas...
... piensatelo, pero si aceptas, que sepas que te vas a correr a partir de ahora solo conmigo
y pocas veces, soy exclusiva muy posesiva y controladora... ¿cuándo eyacularas?... ya te
digo que será de tarde en tarde y dependiendo de cómo te portes. Para que te permita
derramarte he de estar muy “satisfecha” y contenta contigo, bueno, mas bien con “tu
trabajo
”... aparte de percibir que solo piensas, respiras, suspiras y vives por mí cada
minuto del día... que el único sentido de tu existencia es consolar mi coño haciéndolo
divina y magistralmente... tú serás la tercera opción cuando no esté Jorge, mi jefe y
semental, ni Juan. Cuando no me quede otra alternativa recurriré a ti, deseo que este
punto que te quede meridianamente claro, pitito... que luego no quiero malos rollos, ni
malentendidos... aunque... si el resultado del pacto nos gusta... preveo una relación
estable y duradera...
Yo: Sí, María...
María: Mi chochete va ha de ser el único motivo y motor de tu existencia, el exclusivo
objetivo que dé sentido a tu oscura y anodina vida a partir de ahora, que no es poco pitito.
Seguro que jamás habrías pensado en estar con alguien como yo. Si el trato te
parece bien solo vas a pensar en mi rendijita... te dejo un par de días para responderme, en
caso contrario, hemos acabado la conversación en este instante y volvemos a ser dos
desconocidos, como si este contacto jamás hubiera tenido lugar.
...tras un silencio dramático... que se podía cortar... las condiciones no acababan ahí:
María: ...por supuesto no puedes hablarle a tu mujer, ni mucho menos salir con ella a
ningún sitio, a comer fuera, a las compras... no has de compartir nada con ella, para ti solo
debo existir yo, aunque tú para mí seas una puta mierda y estén antes Jorge y Juan.
Si este pacto nos agrada a ambos, tendremos un contrato verbal de “alivio
mutuo
”... casi una relación... casi seremos una “especie de amantes” (me miró soltando
una estruéndosa carcajada) JAJAJAJAJ... seguro que jamás habrías soñado en estar con
una mujer como yo, no estoy a tu alcance y lo sabes, tu “listón” es mucho mas bajo,
pitín... jugamos en “ligas distintas” pero fíjate las extrañas componendas e ironías que
tiene la vida, los giros que dá, podemos establecer una especie de pacto... yo follaré a
base de bien con “mi hombre” de verdad y dejaré que me “la meta” el cabrón de mi
marido (bueno, ella dijo “Juan”, -el cornudo-) y cuando necesite desfogarme no teniendo
nada más que llevarme a la boca, o a mi chochete mejor dicho, recurriré a tí... serás el
tercer plato cuando esté muy “impaciente” y desesperada, pero yo para ti seré la primera y
única opción para vaciar tus minihuevitos. Cuando esté la canguro cuidando de mis
niños quedaremos, ya te diré cómo y donde, nos veremos personalmente y te tocaré tu
miembrito si “te lo has merecido”, te descargaré tus inexistentes bolitas si me apetece y si
te has portado bien...
(mas tarde me enteraría que la canguro se llamaba Vanesa, “la Vane”, una
niñata de la ESO completamente barriobajera e impresentable que tendría una
incidencia infinitamente mas capital en el discurrir de mi vida de lo que en ese momento
llegué siquiera a sospechar)

Yo no salía de mi perplejidad, ¿podría soñar siquiera un minipito-omega como yo
en tener algún rollo con un pibonazo como este?, ¿...en mantener una relación con esta
supermujer por mínima que fuera?... ¿Es posible que pudiera interesarse este pedazo de
tía por un mindungui como yo?. Seguía clavado en el asiento del copiloto sin mover un
músculo... bloqueado... catatónico... como una estatua sin reaccionar... ni saber qué
decir... ¿era posible que aquel bombón, una superwoman tan espectacular me estuviera
diciendo lo que acababa de escuchar, hablándome en ese tono?... le daba cien mil vueltas
a la cabeza que me ardía... -pero mas me ardía la cabeza de abajo- no era capaz de
creerlo y menos de asimilarlo... era demasiada información para mi pequeño cuerpo... y
mi atrofiado sexito...
En esos pensamientos andaba cuando de malos modos María con tono de voz imperativo
y destemplado, casi despectivo, exclama inopinadamente:
María: bueno, fuera del coche, imbécil, baja!!... ya has “disfrutado” demasiado por hoy!!
Yo: pero, pero María... estoy lejos... no tengo medio de... mi casa está en...
Paralizado, seguía imbuido en mis elucubraciones, aún sin creer los términos en
los que hablaba, con el desparpajo que comentaba sus intimidades, y lo que me
proponía!!... lo claro que lo tenía todo, lo directo de la conversación de una mujer que
conocía solo de vista ...con la que nunca había llegado a cruzar palabra, ni a saludarla
siquiera... ¡¡tan elegante y sofisticada!! Y su belleza... era brutal... es que llegaba a
dudar que me estuviera pasando de verdad, y mucho menos que fuera real la erótica
“oferta” que acababa de escuchar!! , imbuido en mis cábalas seguía cuando me vociferó
de nuevo:
María: fuera inútil impotente, cuando tengas abierto y operativo el grupo de whatsapp
interpretaré que es un “sí” a mi oferta, al grupo lo denominas – “pititodeM”... (se puede
interpretar como “pitito de María”, o “pitito de Mierda”, ambas lecturas son correctas y
aceptables) ¡¡...y bájate del puto coche ya, joder!!
Yo (bajándome atropelladamente del auto): Sí, María, lo que tu digas... gracias, gracias...
Comencé a andar despacio... meditabundo tomé el camino de retorno a casa
ubicada a un par de kilómetros desde donde María me “había largado”, en mi lento
paseo intentaba recapacitar, asumir, sopesar... valorando... elucubrando sobre la inmensa
información recibida en tan escaso tiempo y las repercusiones que podrían tener en mi
vida... dudando aún de si me había pasado de verdad... ¿era realidad? Costaba asimilar
las cosas que me pasaban ¡y había sido en un segundo!... seguí recapitulando, analizando
lo ocurrido, intentando comprender...
Pero no, en ese momento ya definitivamente, no pensaba con la cabeza de arriba
sino con la de abajo... notaba como el mínimo penecito se me endurecía de nuevo a pesar
de la pajita recién realizada por las delicadas yemas de los dedos de María, con suma
presteza y rápidez... llegados a este punto era incapaz de razonar, solo deseaba que María
se ocupara de mi pequeño sexo hasta el fin de mis días, aunque fuera de tarde en tarde... y
verla desnuda, ¿sería verdad que podría verla?, ¿se dejaría hacerle de todo?, ¿ser yo el que
le produjera el orgasmo? Hmmm... Comérselo, tocárselo, besárselo, chupárselo,
acariciárselo, degustárselo... hmmmm, y sus tetas... sonrosados pezones erectos,
hmmmmmmm...
Aunque tuviera plena consciencia de no ser un auténtico hombre quizás pudiera
dedicar el resto de mi existencia a ser el consolador humano perfecto que buscaba María.

Quizá como ella decía había nacido predestinado para eso. Empecé a imaginar
como sería mi vida a su lado, utilizar mi boca, mis manos para satisfacerla en todo lo
imaginable, ser el responsable de calmar los ardores de su chicha cuando estuviera
“necesitada”... para que se corra... hmmmmm, comerle su chuminete, sentirlo, tocarlo,
olerlo, saborearlo, introducirle mi lengua por su redondeado culete, recorrerle
verticalmente una y otra vez su empapada rajita hasta que chorreara el néctar de su gozo
para sorberlo... beber el fluído de su gozo, degustar los matices de su sabor como el mejor
y más preciado de los vinos... inhalar su aroma, la esencia de su excitación, , degustar los
matices de su sabor...
...hasta comenzar a sentir el preludio de su éxtasis en mi boca, ser yo la causa que
propiciara manar sus flujos, arrancarle grititos de placer... perciber, notar, palpar
salvajemente su orgasmo con una mano metida en su mojino, maravillosa y acogedora
vulva donde perderse, mientras con la otra experimentar su corrida en los dedos que
mantenía introducidos en su perfecto culo hasta sus entrañas, notar como palpitaba de
placer su ojete, apretando con sus esfínteres mis dedos hasta casi el dolor debido a las
convulsiones de placer producidas por su inenarrable éxtasis de Diosa... para finalmente
una vez acabada su corrida, siguiendo el ritual de los furtivos amantes, lamerle y sorberle
los jugos producidos por su incomparable orgasmo... para limpiarla, higienizarla con mis
labios, mi boca... su chocho... su rendijita, su ano, todo aseado y lavadito con mi
lengua... que su sexo y su culete quedaran en perfecto estado de revisión para
posteriormente subirle su tanguita y dejarla asépticamente preparada para la vuelta a su
domicilio, por si su Juan tenía a bien follarla de verdad, como un hombre...
Para mí solo quedaba recomenzar de nuevo la cuenta atrás del reencuentro...
segundos, horas, días, semanas esperando ansioso la próxima cita real de mi micropito con
su Dueña y poseedora... su señora... que la puntita de sus suaves y delicados dedos
ordeñaran mi cosita... hmmmm... ¡seguro que me volvería a correr enseguida!!!...
...nunca valoraré suficientemente la inmensa suerte que tuvieron mis
subdesarrollados genitales en aquella época, mi micropito y mis huevitos atendidos,
supervisados y controlados por la mas imponente y bella de las Diosas... ¿Acaso había
que plantearse algo?, ¿había algo que pensar, que replantearse?
Antes de llegar a casa, de camino, ya había abierto el grupo de whatsapp para caer
rendido a sus pies.
Ya era “pititodeM”... mi Señora.
La suerte estaba echada (“Alea jacta est”, Julio Cesar).
(continuará)

No hay comentarios:

Publicar un comentario