jueves, 19 de noviembre de 2015

Reflexiones después de 1 mes en castidad

Ya ha pasado 1 mes desde mi última eyaculación libre. Desde entonces las pocas que he tenido han sido autorizadas y controladas. Ya apenas recuerdo el ritual que seguía cuando me masturbaba.


Hablando de porcentajes podemos decir que he pasado de un 100% de masturbaciones diarias en septiembre o en la 1ª quincena de octubre, a un 13% en la 2ª quincena de octubre, o  a como mucho un 6% en noviembre, si la suerte de la ruleta acompaña, que si no, podríamos irnos a un 3%. Estos datos creo que son muy gráficos para explicar el cambio que ha sufrido mi sexualidad en este mes. He pasado de 30 al mes a 2 o quizá 1.

Lo he hecho sin cinturón de castidad. Por un lado porque no tenía quien me controlase la llave, pero además sé de Amas que desean que sus sumisos tengan el autocontrol y la devoción por ellas para no masturbarse sin tener que llevar cinturón, lo que en el fondo hace más fácil el no masturbarse porque lo dificulta, sólo se sienten las lógicas molestias, pero en esos casos el sumiso no hace esfuerzo de autocontrol.


Evidentemente es un cambio libremente aceptado y buscado. Es un control de castidad llevado en la distancia. Controlador y controlado no nos conocemos, ni siquiera sé si es controlador o controladora. Este dato me interesaba en un principio más, porque yo en principio tengo la preferencia de obedecer a una Mujer, creo en la Dominación y Superioridad Femeninas, y aunque aún me gustaría saber el sexo de quien controla el pacer de mi pene, pero prefiero quedarme con el hecho de disfrutar con la obediencia y la castidad que tan bien me está llevando.




El que fuera una castidad controlada por mi pareja sería mucho mejor, no lo niego. Ella, o él, podría verme como estoy, decirme cosas, controlar mejor que cumplo sus deseos, y para mi también sería más intenso. Me podrían poner cinturón de castidad. Habrá quien piense que puedo estar diciendo que no me toco mi pene y luego en mi casa si hacerlo, pero creo que por los mensajes que se van enviando se podía ver que estaba siguiendo al pie de la letra las pautas que se me daban. Al principio recuerdo ser muy pesada mandando mensajes comentando mis dificultades para seguir en castidad y ahora ya estoy más tranquila.



He de reconocer que en este mes he perdido muchas eyaculaciones, pero las pocas que he tenido han sido intensas, y de formas hasta ahora desconocidas. El hacerse una paja diaria, cuando te la haces, es una paja más, pero ahora, al ser menos, las identificas, y las vives con más pasión porque sabes que hace tiempo que no la has tenido y que seguramente faltará tiempo hasta la siguiente masturbación autorizada. Además desde controldecastidad dan indicaciones para que esas pajas no sean completas, y descubres un camino nuevo, que es de los orgasmos arruinados, una sensación increíble, de verdad, y que si no fuera por esto no me habría animado a hacerlo por mucho que mis fantasías eran esas y contradictoriamente, la fuente de algunas de mis pajas, han sido vídeos porno de orgasmos arruinados.

Y entre masturbación y masturbación tienes que seguir recibiendo estimulación, viendo chicas, fotos, vídeos,... con lo que los genitales siguen cargando, y cuando llega el día D, lo acumulado explota y es más intenso, aunque sea arruinado. No es una castidad monacal, es control de la castidad, control de las eyaculaciones y de los orgasmos, siguiendo con excitación.

En este tiempo, poco, comparado con otros sumisos, he tenido días en los que sinceramente he estado a punto de dejarlo. Los primeros días porque tenía un fuerte dolor testicular consecuencia del brusco parón al que sometí a mis testículos, ya he dicho que pasé de una paja diaria a semanales. Pasados esos días, que fueron duros, y a punto de masturbarme, mi pene se fue adaptando, menos erecciones, menos dolor, reaccionaba y se ponía duro cuando lo acariciaba, pero al parar de tocarlo se ponía enseguida flácido y no me dejaba la sensación anterior de estar excitado y necesitar descargar. De hecho hace tiempo que no tengo esos dolores testiculares. Ahora mi pene me recuerda al perrito que lo tienes ahí, te acercas, le acaricias un poquito, se pone contento, mueve su rabito -nunca mejor dicho- pero si le dejas de hacer caso el perrito se va de nuevo a su rincón sin enfadarse.Ahora me encuentro en una fase en la que ya no tengo esa necesidad física de masturbarme, pero tengo una necesidad digamos más psicológica, echo de menos esas pajas, la verdad. Pero por otro lado estoy muy contenta de estar sintiendo esta sensación de frustración, de autoponerme esta limitación.



Ha habido días con dudas.  ¿Por qué no me voy a masturbar? ¿Qué gano con esto? ¿Por qué he de esperar más de 1 semana entre paja y paja, o 2 semanas? Entiendo que antes quizá abusaba, pero ¿no sería suficiente reduciendo algo la frecuencia? ¿El objetivo de controldecastidad es que cada vez sea menor la frecuencia y que cada vez estén más distanciadas las pajas? ¿El objetivo es que llegue el momento que no me masturbe nunca? ¿He aguantado 2 semanas sin masturbarme, pero aguantaré 1 mes, o 2...? 

A estas preguntas van dando ayuda y consejo desde controldecastidad, aunque evidentemente la última palabra es de uno, de aceptar, libremente, y seguir los consejos y la prohibición de masturbarse fuera de lo autorizado. Una de las ideas que dejan claro es que ya no será posible masturbarse como antes ni en la frecuencia de antes. Recuerdo haber pedido autorización para hacerme una solitaria despedida de soltero en uno de esos momento de crisis, y me fue denegada. Entiendo que para no retroceder en lo avanzado. Porque también reconozco que es como un reto contra uno mismo, si he aguantado 10 días sin masturbarme, ¿por qué no 11? ¿y 12? y van pasando los días y ves que si te masturbas empiezas de nuevo de 0 en el contador.

Unas de estos momento de duda han sido hace poco. Tras una noche con erecciones ha pensado en aguantar hasta este domingo, que me toca nuevo tiro de la ruleta, y llevaré 2 semanas sin eyacular .y sin tocarme el pene con la mano- y hacer una despedida organizada, con autocontrol, pero seguramente al final siga. Desde controldecastidad no dicen, a mi al menos- como está planificada la reducción progresiva de pajas, ni el objetivo final. Me imagino que el objetivo será cero pajas y que se irá reduciendo la distancia entre paja y paja con mayor o menor velocidad en función de lo que aguante el sumiso.



Una de las ideas que se siguen, de forma no explícita. es una idea que siguen algunos pacientes de tratamientos para recudir dependencia de alcohol, u otras drogas, y que es la conocida idea de que no quiero fijarme en no hacerme pajas en períodos largos, solo me tengo que preocupar de no masturbarme hoy, de controlarme, de hacer algo para evitar tener esa caída, y al final, día a día, sin darte cuenta, veras que acumulas períodos largos.

Y al no masturbarse tanto, ese tiempo lo puedes dedicar a cosas que antes no hacías o que hacías menos.

En mi caso además, me han ido mezclando el avance en castidad con la feminización, aunque en esto reconozco que no he avanzado apenas, por mis miedos y limitaciones. Pero el tener que realizar ciertas cosas para ir feminizándome algo, me ponía más cachonda, y me hacía más difícil poder seguir con la castidad, porque en otras condiciones esa feminización me hubiera hecho hacerme una paja por la excitación.




En resumen, animo a quien tenga algo de curiosidad a seguir por este camino de la castidad dentro de una idea no religiosa sino más dentro de Dominación Femenina (o masculina) porque te hace ver alternativas a como vemos nuestra sexualidad, te hace descubrir nuevas facetas íntimas, te hace ver que además de excitarse tu pene con la mano o con una vagina puede excitarse con una brocha (suave de maquillaje, no de gotelé), el poder de la mente sobre el pene. Gratifica mucho sentir que uno controla al pene y no el pene a uno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario